lunes, 25 de septiembre de 2006

También los profes somos personas y tenemos derecho a quejarnos

Pues sí, si es que últimamente me da hasta vergüenza decir que soy profesora, si es que parece que tenga que pedir perdón por tener dos meses de vacaciones. Ahora resulta que no puedo ni decir que estoy cansada este principio de curso porque hoy mismo casi se me echan encima recriminándome que de qué me quejo, ¡que si tengo dos meses de vacaciones pagadas! Y yo la verdad es que este tema lo tengo más que superado, que tengo mi conciencia muy tranquila de que precisamente no me estoy aprovechando vilmente cual concejala marbellí de los dineros de los contribuyentes, sino que más bien la sociedad nos explota a nosotros porque nos arroga, sin acritud y desde el cariño, la humilde tarea de solucionar absolutamente todos los problemas de la sociedad. Y no voy a entrar a justificar que cobre los dos meses de vacaciones, porque me parece obvio. Vamos, que yo el tema me lo tomo a cachondeo ya, pero para eso tengo mi blog, para desahogarme.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Vamos a ver, vamos a ver...¿pero quién se mete contigo, con lo que tú trabajas? La cosa es: hay gente que en 10 meses laborables al año hace el doble que otra gente en toda una vida.
Ayyyyyy...qué mala es la envidia!
(aunque, por otra parte, mira que estaría bien tener dos meses de vacaciones, yo quieroooo!!! :-p)

Lidia dijo...

Gracias querida, sabía que podía contar contigo, como siempre.
Besos!
Lidia :)