martes, 13 de marzo de 2007

Sonia me ha dedicao esta canción de Bebe

Ella

Ella se ha cansado de tirar la toalla
se va quitando poco a poco telarañas
no ha dormido esta noche pero no esta cansada
no mira ningún espejo pero se siente to’ guapa

Hoy ella se ha puesto color en las pestañas
hoy le gusta su sonrisa, no se siente una extraña
hoy sueña lo que quiere sin preocuparse por nada
hoy es una mujer que se da cuenta de su alma

Hoy vas a descubrir que el mundo es sólo para ti
que nadie puede hacerte daño, nadie puede hacerte daño
Hoy vas a comprender
que el miedo te puede romper con un solo portazo.
Hoy vas a hacer reír
porque tus ojos se han cansado de ser llanto, de ser llanto…
Hoy vas a conseguir
reír tanto de ti y ver que lo has logrado que…

Hoy vas a sé la mujé
que te dé la gana de sé
Hoy te vas a queré
como nadie te ha sabío queré
Hoy vas a mirá palante
que patrás ya te dolió bastante
una mujé valiente, una mujé sonriente
mira como pasa

Hoy no has sido la mujer perfecta que esperaban
ha roto sin pudores las reglas marcadas
Hoy ha calzado tacones para hacer sonar sus pasos
Hoy sabe que su vida nunca mas será un fracaso

Hoy vas a descubrir que el mundo es sólo para ti
que nadie puede hacerte daño, nadie puede hacerte daño
Hoy vas conquistar el cielo
sin mirar lo alto que queda del suelo
Hoy vas a ser feliz
aunque el invierno sea frío y sea largo, y sea largo…
Hoy vas a conseguir
reír tanto de ti y ver que lo has logrado…

Hoy vas a descubrir que el mundo es sólo para ti
que nadie puede hacerte daño, nadie puede hacerte daño
Hoy vas a comprender
que el miedo te puede romper con un solo portazo.
Hoy vas a hacer reír
porque tus ojos se han cansado de ser llanto, de ser llanto…
Hoy vas a conseguir
reír tanto de ti y ver que lo has logrado ohhhh…

domingo, 11 de marzo de 2007

Hitchcock y las cebollas

Hay que ver, con lo ignorante musical que soy, lo musicalmente profundo y sublime que ha sido este fin de semana...

El viernes fuimos a un concierto de flamenco a un conocido a la par que minúsculo local del Raval. La verdad es que la mayoría de los que fuimos no sabíamos muy bien qué íbamos a ver, y tampoco hoy os sabría decir quien cantó y tocó. El lugar, al que el apelativo minúsculo le queda ancho, se llenó hasta la casi asfixia de los asistentes. Antes de empezar, el presentador nos introdujo al cantaor y al guitarrista casi como lo mejó der mundo mundiá, y nos conminó a que, por favor, ni aplaudiéramos ni hiciésemos comentarios inoportunos durante la actuación. Esto a mí me dejó estupefacta, y por lo visto al resto de los asistentes también, porque después de la amenaza, allí ya nadie se atrevió ni a respirar. La música resultó ser cante jondo... pero jondo, jondo... que me retrotrajo hasta mi juventud cuando íbamos al pueblo y el día de su fiesta grande mientras los jóvenes iban al disco pub (pronúnciese di’co pá), los mayores, ataviados con sombrero y bastón, escuchaban cante jondo hasta altas horas de la madrugada en la plaza del pueblo y el quejío del ay yayay se hacía eco en toda la sierra de la Almijara. Pues aquí en Barcelona, que somos de lo que no hay, y la cuestión es ser diferentes, los que van a escuchar cante jondo son los jóvenes, mitad Erasmus, mitad autóctonos catalanes o del resto de España (ahora no sé qué tengo que decir... España? Estado Español? Las Españas?... estoy en un sin vivir con este tema, oye...).
A lo que iba, que a mí el flamenco me gusta, pero quizá tan jondo es demasiao para mí, y además, me pareció todo un poco frío, sin pal
mas, sin un solo “ooole” ni “ele ahí”, ni “ole tu’ güevo’”, que además sirven de feedback al cantaor para que saque todo su arte. A lo mejor tras el descanso, en la segunda parte se animó la cosa, pero no nos quedamos a comprobarlo y en su lugar, nos fuimos a comernos un shawarma.

El sábado el estilo fue diametralmente opuesto. El padre de Virginia, una de mis mejores alumnas, es un compositor de música reconocido internacionalmente (y este sí que lo es de verdad). Yo, por supuesto, no había oído hablar nunca de él antes de tenerla a ella como alumna, y desde que lo sé, tampoco oigo hablar de él porque no me muevo en esos ambientes ni entiendo de esa música, pero este sábado daba un concierto en mi ciudad natal y su madre, con la que tengo muy buena relación, me invitó a que fuera, a lo que por supuesto accedí encantadísima.
El concierto fue en un teatro recogidito e íntimo. A los profesores que estábamos invitados nos colocaron estratégicamente: la directora y su enemiga acérrima, una en cada punta, y a mí, que iba sin pareja, me sentaron junto a Virginia, que me contó cotilleos varios sobre los miembros de la orquesta.
Por lo que me han contado, se trata de música de cámara moderna. Desde mi ignorancia, si lo tengo que describir, es como si escucharas la banda sonora de una película de Hitchcock, realmente me venían a la mente escenas de persecuciones con un extraño en los talones, una pelea al borde de un acantilado, el despertar tras una pesadilla, e incluso la escena del cuchillo en la bañera. Me sorprendió y me gustó, aunque la verdad es que no me voy a comprar el cd para escucharlo en casa. Ahora, lo que me mató fue, en un momento dado, vete tú a saber por qué motivo cósmico, me dio por levantar la mirada hacia el techo y cuando vi el escudo tan poco glamuroso de mi ciudad natal, con una cebolla en el centro, mientras la música me llevaba a imaginar la escena de los pájaros atacando la cabina, qué queréis que os diga, ver una cebolla me cortó el rollo...


Nena, para ti

Camino Interior (Chambao)

Temores, suspiros, quebrantos
que traen el llanto.

Deseos,
esa extraña fuerza que me povoca, aaayayay!!

Palabras,
que se las lleva el viento y son de mi boca

Pensamientos malos que me envenenan
yo quiero librarme de esta condena.

Y encender esa luz
que llevamos dentro...

Destellos, conectan lo puro
que llevo dentro.

Sonrisas
calor y dulzura pa mis adentros ooayayay!!

Miradas, que rozan la punta el entendimiento
pensamientos puros que me liberan
lleno de bondad y buenos sentimientos.

Y encender esa luz
que llevamos dentro...

domingo, 4 de marzo de 2007

Wok revival

La cena wok para los ganadores del concurso se acabó convirtiendo en un revival de anécdotas de viajes en el extranjero, aderezado con una pizca de cotilleo-critiqueo subido de tono que tanto nos gusta. Y esto me ha dado una idea para el blog que ya os comentaré otro día,
porque hoy no me va a dar tiempo.

Tengo que decir que al volver a las tres de la mañana y entrar en mi piso que rezumaba todo él restaurante chino, me asaltó un antojo imperioso de pan de gambas y no tuve más remedio que ponerme a hacer.
Os pongo aquí la receta de anoche por si la queréis hacer, es muy sencilla y salió buena. Habrá que seguir explotando las infinitas posibilidades del wok. Bueno, de hecho, hoy lo he vuelto a utilizar, he improvisado un plato de fideos con restos varios que tenía en la nevera y ha quedado bueno.

Fideos de huevo chinos con pollo y gambas

Ingredientes para 4 personas

sal
250 g de fideos de huevo chinos
1 manojo de cebollas tiernas
2 dientes de ajo
300 g de pechuga de pollo
1 chile
4 cucharadas de aceite vegetal
100 g de gambas peladas
50 g de brotes de soja
1 cucharada de jengibre molido
4 cucharadas de salsa de soja

Por un lado se hacen los fideos. Se pone agua en una cacerola y cuando hierve se echan los fideos y con ayuda de unos palillos se remueven para separarlos. Se retira del fuego y se dejan en remojo 2 0 3 minutos. Seguidamente se cuelan, se enjuagan con agua fría y se dejan escurrir.

Por otro lado, se pican los ajos, se cortan las cebollas en tiras, se pelan las gambas y se corta el pollo en tiras pequeñas. Se lava el chile, se quitan las semillas y se pica fino.

Se echa aceite en el wok y cuando está caliente, en primer lugar se pone la carne y las gambas y se saltean sin parar (o se remueven, según la gracia y la maña del cocinero). Cuando están salteadas, se echan el ajo, la cebolla y el chile.

Cuando ya está cocinado, se retira el wok del fuego y se añaden los fideos, los brotes de soja, la salsa de soja y el jengibre y se mezcla todo bien.