domingo, 11 de enero de 2009

A polis y ladrones - El mirón (XVII)


Tras oír el mensaje en el que Santiago me conminaba a personarme en la comisaría sin dilación, que me había dejado en el buzón de voz del móvil mientras yo ejercía mi noble labor social de enseñar una lengua que siempre aparece en los peores puestos en las estadísticas sobre conocimientos de los estudiantes españoles, me puse rumbo al cuartelillo repasando mentalmente mi coartada para los acontecimientos de la noche anterior sobre los que estaba segura que Santiago me iba a inquirir.

-Hola Laura, te estaba esperando. Pasa.

Y Santiago me acompañó a un despacho donde entramos ambos.

-¿Me puedes decir qué hiciste anoche?

-¿Anoche? Sí, claro. Estuve cenando en casa de un amigo, y bueno, ejem, volví a mi casa pasadas las tres de la madrugada...

-Y ya está, ¿no hiciste nada más de vuelta a casa?

- No... Bueno, sí, ahora que lo dices. Cuando volvía a casa en coche, me encontré a tres personas que pedían ayuda en mitad de la calle y me paré, me pidieron que los llevara al hospital y los acerqué. Luego me fui para casa.

- ¿Y no los conocías de nada?

- No.

-¿Y no viste nada más?

-No.

-¿No oíste unos disparos?

-No

- ¿Me puedes decir los nombres de las personas que recogiste?

- No se lo pregunté, sólo los llevé al hospital, como estaba cerca, no dio tiempo de nada.

-¿Y me podrías hacer una descripción de cada uno?

-Uf, es que soy muy mala fisonomista... Ya te digo que ni me fijé casi...

- Laura, no sé qué relación tienes con lo que pasó anoche en la calle Rubió i Ors, pero te voy a tener que encerrar en algún sito para que dejes de meterte en líos...

-Pero qué lío, si yo no he hecho nada ahora...

-Te aviso que te estás metiendo en algo muy gordo... Antes venías a contarme las cosas que averiguabas, ¿por qué ya no lo haces?

-... La última vez que vine a explicarte un descubrimiento que era sumamente importante para la investigación de los asesinatos en mi finca, tú no me dijiste que habíais descubierto que Pere era el propietario del piso maldito.

-Es que yo no tengo porqué explicarte a ti nada.

-Vale.

...

- Si no me dices a quien recogiste ayer estás cometiendo un delito. El juego de policías y ladrones ya se ha acabado, dime lo que pasó y deja que nos ocupemos nosotros ahora.

-Sí, sí, yo estaré jugando, pero he averiguado muchas cosas antes que vosotros...

-Si no me dices lo que sabes, no te voy a poder proteger, porque estoy seguro de que los de anoche te van a buscar a ti y a tus amigos que recogiste, y no va a ser para hablar precisamente... Y que sepas que has tenido mucha suerte de que anoche estuviera yo de guardia, por ahora soy la única persona que sabe que el coche del tiroteo de anoche es tuyo.

...

- Es que no sé si puedo confiar en ti...

...

- A ver, vamos a hacer un trato... – me dijo

Dos horas más tarde estaba de vuelta a casa, al acercarme al portal vi que había un anuncio en la fachada, ponían en alquiler el sexto tercera. ¿La violinista se iba de nuestra finca? Era una de las vecinas sobre las que menos sabía a pesar de que vivíamos pared con pared. Tenía que hacer algunas averiguaciones antes de que se marchara. Pero antes, llamé a Paco al móvil, que se había ido unos días con Esther a esconderse a una comunidad budista en mitad del Montseny, para explicarle el trato que había hecho con Santiago.

7 comentarios:

Mercedes Pajarón dijo...

BIEEEEN! Volvemos a nuestra ración de emociones fuertes! Mujer, que nos has tenido abandonados demasiado tiempo! :-D

Lidia dijo...

Es que para mí las vacaciones son sagradas, mi religión me impide trabajar ... XD

Anónimo dijo...

Y haces bien en no trabajar en vacaciones, sí señora, pero ahora... ¡queremos saber cuál es el trato que Laura ha hecho con Santiago,así que espabila! jejej

Lidia dijo...

... ahora que lo pienso... qué larga que está resultando esta historia... y eso que cuando escribí el primer capítulo pensé que me iba a durar tres o cuatro semanas...

Anónimo dijo...

La vida te da sorpresas, sooor..presas te da la vida!

Anónimo dijo...

...Que ya te lo digo yo, que de aquí sale una novela de película! Algún día me encantaría poder leérmela enterita. Fíjate qué fácil, un documento de word con tooodos los capítulos! Me haría tanta ilusión leerla...! (ejem, mi cumple es en mayo) XD

Lidia dijo...

je je, vale, algo tendré que hacer... ;)