domingo, 30 de noviembre de 2008

A polis y ladrones - El mirón (XV)

-Vengo a pedirte un favor... – me soltó Paco en guisa de saludo al abrirle la puerta de mi casa.
-¿Qué pasa...? Bueno, entra ... – le dije cerrando detrás de él - ¿Quieres algo...? ¿Un café, un té...?
- Prefiero no tomar nada excitante en este momento...
- ¿Un zumo...?
- Vale.
Desde luego, Paco estaba muy nervioso, como no lo había visto desde hacía mucho tiempo.
-Te voy a pedir un favor, pero si no quieres meterte en esto, me dices que no y ya está, ¿vale? Ya buscaré a otra persona, no quiero que te sientas obligada, pero es que necesito a alguien de confianza y he pensado en ti...
-Vale, dime...
- A ver cómo empiezo... ¿Te acuerdas hace unas semanas que estuvimos hablando de Esther, cuando la viste en aquel programa que iba de sectas y te conté lo que había pasado?
-Sí...
-Pues, hace unos días, una de mis alumnas de tai-chi, que conocía a Esther porque también le había dado clase de pilates, me dijo que la había visto entrando en una casa, me dio la dirección, y fui.
- ¿Ah sí? ¿A la secta...?
- Bueno, me quedé en la calle, fui a ver si la veía...
- ¿Y la viste?
- Sí... y ella también me vio, de lejos, iba con más gente... Me miró aterrorizada... Tengo que sacarla de allí...
-¿Qué?
- Que voy a ir sacarla de allí.
- Y si no quiere irse...
-Sí, quiere. Tenías que haberle visto la cara... Mira, yo aún la quiero. No supe ver lo que le pasaba cuando se metió en la secta, y cuando desapareció me lo tomé como que era contra mí y no hice nada cuando supe que estaba en una secta... Ahora he estado informándome bien, ya sabes que yo antes llevaba otra vida, y conozco a gente que se mueve en ciertos ambientes...
-Ya, ya...
-... me han dicho que de casa de acogida nada, y que es mucho más que una secta de flipaos que te lavan el cerebro para que trabajes para ellos y ganar dinero, es muchísimo peor...
- Peor como qué...
- ... como prostitución...
-¡¡Qué!!!
-Tengo que ir a buscarla...
- ¡Pero qué me estás diciendo, estás seguro de eso!
-Segurísimo...
- Joder, Paco, me has dejado de piedra... ¿Y qué vas a hacer? ¿Se lo vas a decir a la policía...?
-Yo primero voy a ir a sacarla a ella, no me fío de lo que haga la policía, me han dicho que hay personas importantes metidas en este tema...
-¿¡Pero qué dices....?¡
- Créeme...
- ¡Qué fuerte...!
- A ver, te cuento el plan. Voy a ir con dos colegas, en mitad de la noche, vamos a entrar en la casa donde vive con más gente y nos la vamos a llevar...
-Así, a saco...
- Sí, llevamos días vigilando el sitio, uno de los que me ayuda se hizo pasar por revisor del gas hace unos días y pudo entrever la distribución de la casa... Echaremos un gas para que no se despierten...
- Y no sería mejor ir a la policía...
- Ya te he dicho que primero la saco de allí, y luego ya veremos si vamos a la policía, pero cuando ella esté fuera...
-¿Y no la podéis coger un día por la calle? Joder, es que me parece súper peligroso que entréis en un piso donde hay gente que, si es verdad lo que dices, pueden ser realmente peligrosos...
- Ya lo habíamos pensado, pero por la calle de día pueden pasar mil cosas. Así podemos controlar mejor la situación, mi colega y yo sabemos defendernos y, de todas formas, como comprenderás, también vamos a ir armados...
- Joder, joder, joder, Paco, estoy flipando, esto es muy fuerte... Y yo, ¿qué hago?
-Nada, tú te quedas en tu casa y esperas a que te llamemos. Te haré una perdida cuando vayamos a entrar y cuando salgamos te llamaré en seguida, si algo va mal, el que se queda en el coche te llamará para que llames tú a la policía.
- ¿Y por qué no llama él...?
- Él no quiere ver a la policía ni en pintura, y además, necesito que alguien lo explique todo bien si me pasa algo...
- ¿Y si os acompaño...? Quiero decir, si me quedo esperando en el coche con tu colega...
-No, no, no, de eso nada, no quiero poner en peligro la vida de nadie más...
-¿Y si no recibo una segunda llamada? ¿Y no será mejor que esté allí? ¿Y si me pongo nerviosa y llamo antes de tiempo?
- Que te he dicho que no, tú te esperas a que te llamen.
- Pero...
- Que no, o se lo digo a otra persona...
- Vale, vale, me quedo en casa. ¿Y cuándo lo vais a hacer?
- Esta noche o mañana, hay uno que está vigilando...
- ¿Esta noche? Tío, esto se avisa antes, no estoy preparada...
- Preparada para qué, si tú no tienes que hacer nada, sólo esperar a que te llame...
-... bueno, quiero decir, preparada psicológicamente...
- Bueno, cuento contigo o no.
-Sí, sí, claro... Entonces, a ver, repasemos el plan. Tú me harás una perdida cuando vayáis a entrar, y luego tengo que recibir otra llamada, o para decirme que todo ha ido bien, o que tengo que llamar a la policía...
- Sí...
- ¿Y si no recibo la segunda llamada?
- Sí habrá una segunda llamada, no ves que el del coche no va a entrar, sólo espera...
- Y si algo va mal...
-Ay pues, mira, si pasa mucho tiempo y no te llamamos, pues llamas a la policía y ya está...
- ¿Y cuánto es mucho tiempo? ¿Y cuándo sabrás cuando lo vais a hacer...?
- Si todo va bien, será esta noche.
- ¿Me avisarás?
- Sí, te llamaré para decírtelo, la perdida vendrá después...
- ¿Y qué diría Confucio de esto..?
- ...una de las frases de Confucio es : Debes tener siempre fría la cabeza, caliente el corazón y larga la mano. Yo la he interpretado a mi manera... Y mira, sino, sabes qué te digo... en este momento Confucio me la suda...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Jo...lines, cómo está el patio! Esto se pone calentito, calentito...

Anónimo dijo...

Madre mía!! menudo berenjenal! a ver cómo salen de ésta...

Mercedes Pajarón dijo...

Me quedo con la frase "QUÉ FUERTE!".La historia no tiene desperdicio!!!!!

ME ENCAAANTAA!!!!!!